Las mujeres sufrieron el ajuste de Milei en 2025 y las respuestas del Estado para combatir las violencias que negaron los funcionarios una y otra vez fueron escasas, en un país donde en lo que va de este año ya hubo 208 víctimas.
Esto se completa con ataques discursivos constantes y, ahora, de acuerdo a Schenone, con "una búsqueda por desdibujar a la violencia de género como fenómeno específico", ya no solo en instancias internacionales. En el proyecto de presupuesto, se incluyeron algunos programas bajo líneas más amplias de acceso a la justicia, por lo que ya no es posible saber cuánta inversión tiene lo que es específico de violencia de género. "Y esto va en línea con el discurso oficial que continuamente busca negar que la violencia de género existe, que tiene sus particularidades, bajo el supuesto de que todas las violencias son iguales y de que el Estado no tiene porqué tomar acciones específicas, desconociendo todas las obligaciones que nuestro Estado tiene hacia las mujeres y diversidades que enfrentan situaciones de este tipo", subrayó.
Detrás, hay más recortes y menos herramientas para las victimas. El informe de ELA expone, por caso, que la Línea 144, principal canal de atención a personas en situación de violencia, perdió dos tercios de su presupuesto en 2024 y redujo un 45 % su planta de trabajadoras. En 2025 y 2026 también se eliminó su línea presupuestaria específica, lo que impide saber cuántos recursos se le asignan y ejecutan. Según datos informados en respuesta a pedidos de acceso a la información pública sobre metas de 2023, las personas asistidas por la línea 144 fueron 180.000 mientras que las intervenciones realizadas en ese año fueron 50.000. "De acuerdo al análisis de los datos no observamos un aumento de la inversión en políticas contra la violencia de género sino todo lo contrario", enfatizó.