El sindicato metalúrgico puso de manifiesto también su compromiso con la defensa de la Ley 26.539/09, que estableció hace 16 años aranceles sobre la importación de determinados productos tecnológicos, para impulsar la industria electrónica nacional, base de la actividad fabril de Río Grande.
Las fábricas afectadas desde el 14 de mayo, según Afarte, incluyen a empresas como Newsan, Mirgor, Solnik, Radio Victoria, BGH y Midea Carrier, con plantas en Río Grande y Ushuaia.
En paralelo al paro, el gobernador fueguino Gustavo Melella convocó para este jueves en la Ciudad de Buenos Aires a directivos de las empresas y a representantes sindicales, con el fin de firmar un acta de compromiso que garantice la continuidad laboral de los trabajadores.
Melella viene manteniendo intensas tratativas con empresarios y sindicalistas de las industrias afectadas, así como con distintos espacios políticos, y a través de la red social X destacó que "es fundamental garantizar los puestos de trabajo y el sustento para miles de familias fueguinas".
Esta semana, el titular de la cartera de Hacienda, Luis Caputo, se refirió a la quita de aranceles al ingreso de productos que se fabrican en Tierra del Fuego y se autoelogió por considerar que tomó una decisión contraria a los intereses de su propia familia.
La intención del ministro de Economía es profundizar la reducción de impuestos para los productos electrónicos que se fabrican en suelo fueguino aunque la medida vaya en desmedro de la empresa Mirgor, propiedad de su primo Nicolás "Nicky" Caputo.
A través de dos decretos que se publicarían en los próximos días, el Gobierno nacional dará curso al desmantelamiento de los beneficios fiscales de Tierra del Fuego. Se reducirán de forma gradual los aranceles de importación para celulares que pasarán del 16 al 0 por ciento en 2026 y los impuestos internos para productos electrónicos del 19 al 0 por ciento.
El régimen de promoción industrial está vigente desde 1972. Se implementó para poblar Tierra del Fuego y tuvo éxito: la isla pasó de 13.500 a 190.000 habitantes. Los beneficios fiscales posibilitaron la creación de 11 mil puestos de trabajo en un lugar inhóspito para vivir.