En lo que va del año, en el reparto de las transferencias discrecionales en general (entre las que están los ATN) el único distrito que muestra alzas es Ciudad de Buenos Aires (también gobernada por el PRO): 8,6 por ciento devengado y 17,3 por ciento pagados. Esto no ocurre por gracia de Milei a Jorge Macri, sino porque hay un fallo de la Corte Suprema que le obliga a pagar. Todo el resto de las provincias está en un balance negativo.
Los distritos más castigados son Formosa, La Pampa y La Rioja, donde supera el 95 por ciento de caída de transferencias discrecionales con respecto al gobierno anterior. Casualmente o no, son tres gobernadores opuestos a Milei (Gildo Insfrán, Sergio Ziliotto y Ricardo Quintela).
Estos datos tienen más relevancia aún si se toma en cuenta que, de no cambiar el rumbo, el Gobierno no avalará que haya Presupuesto 2025. Esto dará una materia aún mayor de transferencias discrecionales para el año que viene, lo cual puede -llegado el caso- disciplinar a los gobernadores que quieran sacar los pies del plato.
Entre los reclamos que le presentaron los gobernadores de Juntos (antes Juntos por el Cambio, está el reparto equitativo del remanente de fondos de ATN. Milei se niega a hacerlo, entre otras cosas, porque plantea que eso beneficiaría a Axel Kicillof, y lo que busca es perjudicarlo.