También se concretó el reemplazo de tanques y sistemas de almacenamiento, además de la instalación de torres elevadas que permiten mejorar la potencia y circulación del agua termal. El circuito completo —desde la extracción del agua hasta su distribución en baños individuales, piscinas y espacios terapéuticos— se está optimizando para ofrecer un servicio más eficiente y seguro.
Sobol explicó que el agua termal, por su alto contenido mineral, provoca un deterioro más rápido en la infraestructura. Por ello, además de las obras hidráulicas, se realizaron trabajos en cañerías internas, mantenimiento de techo, reparación de membranas y mejoras en sectores operativos del complejo.
A pesar de las tareas en curso, varios servicios continúan funcionando con normalidad: Sauna y baño turco, piscina cubierta de agua dulce, piscina termal al aire libre, flotario, masajes, cursos de natación para niños y adultos.
El secretario destacó la importancia estratégica del Complejo Termal para el turismo local y regional: “Es uno de los principales recursos turísticos de Sáenz Peña. Recibimos visitantes de todo el país, especialmente durante el invierno. Mantener este espacio en óptimas condiciones es fundamental para el desarrollo de la ciudad”.
Las obras continuarán durante los próximos 30 a 45 días, período en el que se completará el traslado del sistema eléctrico, la instalación de la caldera y las últimas conexiones de gas. Además, ya se proyectan trabajos adicionales para el año próximo con el objetivo de dejar el complejo en condiciones óptimas.
La Municipalidad reafirma así su compromiso de preservar y mejorar un espacio histórico y distintivo, garantizando que vecinos y turistas sigan disfrutando de los beneficios de nuestras aguas termales.