Pullaro es uno de los gobernadores fuertes. Triunfó en 2023 con casi el 60% de los votos, seguido de la opción peronista que alcanzó el 30% y muy lejos la opción referenciada en Javier Milei, que no llegó a los siete puntos.
Dado el caudal de votos, la posibilidad de pactar, tanto con Pullaro como con cualquier mandatario, depende también de las condiciones que pida La Libertad Avanza. El gobierno quiere, en principio, que todas las alianzas lleven su sello y su color. En cuanto a las listas, tienen la pretensión de lograr la mayor pureza posible para asegurarse votos fieles en el Congreso.
En el caso del acuerdo con el PRO, los libertarios no van a seleccionar los nombres de las listas, pero sí pueden vetarlos. No quieren imprevistos. Buscan votos leales porque, después de dos años de mandato, la baja de la inflación dejará de ser una novedad y la ciudadanía empezará a tener otras demandas, básicamente vinculadas a la intención de vivir mejor.