A esto le siguió con un 13% la “escasez de mano de obra calificada” y la menor inversión en obras privadas.
En cuanto a las proyecciones para 2024, el 46% de los encuestados anticipó un descenso en su actividad, el 27% espera que se mantenga y un 18% prevé un aumento.
“Entre los constructores y arquitectos, 41% respondió que espera una caída de su actividad en el próximo año, mientras que las inmobiliarias y los desarrolladores se mostraron más optimistas que el resto de los eslabones de la cadena de valor”, puntualizó el trabajo.