También los estudiantes manifestaron su apoyo a la causa. Joaquín Carvalho, presidente de la Federación Universitaria Argentina (FUA) que representa a dos millones de estudiantes universitarios en todo el país, dijo que también ellos sufren las consecuencias del deterioro del sistema y de los bajos salarios docentes. “Vemos con preocupación lo que está pasando. En este contexto, donde también se discute el presupuesto del 2026 y hay muy poca claridad sobre qué es lo que le tocará al sistema universitario, creemos que los docentes están en todo su derecho de movilizarse”.
“La universidad representa lo público y al mismo tiempo la vida en común, la solidaridad, el compañerismo, el pensamiento crítico, la posibilidad de establecer discusiones, de pensar lo impensado, de elaborar horizontes emancipatorios. Bueno, todo eso es lo que el gobierno desprecia” dijo Perazzi, y explicó que desde diciembre de 2023 hasta la fecha, según datos del Indec, la inflación es de un 240 por ciento, mientras que los aumentos docentes redondean el 136 por ciento, por lo que “hay un desfasaje enorme”.
La ley, de la que se reclama cumplimiento, tiene como objetivo proteger y garantizar el financiamiento de la educación universitaria pública en todo el país. Persigue el fin de “afianzar el ingreso, la permanencia, y la terminalidad del estudiantado y la formación continua” y, entre otras cosas, “garantizar las condiciones laborales y salariales de los/las docentes y no docentes para sustentar el desarrollo universitario, incluyendo la plena implementación de los convenios colectivos de trabajo”. Es un proyecto que busca garantizar una educación de calidad, con investigación universitaria y áreas de extensión, fortaleciendo “el acceso, la permanencia, la promoción y el egreso de los y las estudiantes”.
Rodríguez, desde ADULP, pudo evaluar por informaciones de compañeras y compañeros delegados que el paro comenzó con fuerza. “Ha sido un paro muy importante, hay mucha bronca entre los compañeros por la no implementación de la ley de financiamiento universitario, por la eliminación de las paritarias y por el retraso salarial que ya nos ha hecho perder el 50% del poder adquisitivo desde que asumió el gobierno de Javier Milei”.
En un contexto de preocupación y desgaste, las universidades públicas de todo el país frenaron total o parcialmente sus actividades para visibilizar la situación. Se teme que las clases no puedan comenzar con normalidad en el primer cuatrimestre del 2026 si no se implementa la Ley de Financiamiento Universitario. Rodriguez resaltó que “la medida de fuerza de estos tres días de paro docente universitario fue tomada a partir de la consulta realizada en todos los sindicatos que componen nuestra Federación, la ConaduU, donde se convocó a compañeros y compañeras a opinar sobre la continuidad del plan de lucha y las medidas que había que tomar”.