Según trascendió, uno de esos detalles es una cláusula que el jugador intenta introducir en el nuevo contrato: la opción de salida a mitad de año si eventualmente lo busca otro equipo, eventualmente el de la Ribera.
Una cláusula que se activaría únicamente con una oferta de club a club; es decir, si Boca presenta una propuesta concreta y formal a la Roma para quedarse con el campeón del Mundo y dos veces campeón de América.
Detalle, por cierto, que no termina de dar por tierra con todas las ilusiones de los hinchas que este año quieren volver verlo demostrar su talento en los estadios argentinos y ayudar a un “resurgimiento” de los dirigidos por Fernando Gago, que desde hace tiempo no logran victorias relevantes en el torneo local ni a nivel internacional.