El adolescente fue localizado por una banda al pie del edificio y, cuando se dieron cuenta de que llevaba una pistola, le dieron una feroz golpiza, le dieron medio centenar de puñaladas y luego lo prendieron fuego.
Tras esta muerte, el mismo preso de Luynes encargó un segundo "contrato" de venganza, reclutando a un menor de 14 años para que fuera a matar a un miembro de la banda de los "Negros", esta vez por 50.000 euros, según refleja el diario español El Mundo.
El adolescente salió para cumplir su misión en un auto de aplicación y pidió al conductor que le esperara, a lo que el conductor se negó. Enseguida, el menor le disparó en la cabeza al conductor con la pistola Magnum 357.
Con estos dos últimos casos, el número de homicidios vinculados al tráfico de drogas, se eleva a 17 desde principios de año. Sin embargo, según las cifras de la AFP y de la fiscalía, el número de estos crímenes disminuirá considerablemente en 2024, frente al récord de 49 muertes registrado en 2023.